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#RecluTips habilidades blandas que se requieren y cómo enseñarlas

Les traemos 6 habilidades blandas que se pueden enseñar, medir y desarrollar a través del juego y otras prácticas.


Las habilidades emocionales son esenciales para el éxito en la escuela, el trabajo y la vida. Sin embargo, enseñarlas y evaluarlas de una manera formal muchas veces no es tan sencillo y puede ser un desafío. Seleccionamos 6 habilidades blandas que los estudiantes necesitan y cómo enseñarlas en la escuela.

¿Qué son las habilidades blandas? Habilidades blandas, habilidades del siglo XXI, soft skills o habilidades de aprendizaje social y emocional. Más allá de cómo se elija llamarlas se definen como las cualidades que, independientes del conocimiento adquirido, son deseables para ciertos trabajos, como son tener una actitud flexible y positiva, el sentido común y el manejo de personas.

​Es decir, son una combinación de habilidades sociales y de comunicación, rasgos de la personalidad, actitudes,​ inteligencia social y emocional, que facultan a las personas para moverse por su entorno, trabajar junto a otros y realizar un buen desempeño. 

Generalmente, estas habilidades las aprenden los niños de manera natural relacionándose con otras personas. Y contrario a lo que se piensa, si una persona no posee alguna de estas habilidades blandas o no logró adquirirlas, se puede entrenar para que acabe desarrollándolas.

Además, las habilidades blandas marcan esa diferencia en el ámbito laboral, ya que son esas competencias, hábitos y comportamientos los que distinguen a dos personas que, por ejemplo, han estudiado lo mismo y obtenido iguales resultados académicos, pero en el momento de emprender un proyecto, solucionar un conflicto o relacionarse con los demás, son más exitosas. 

El futuro de las habilidades blandas Según un informe de la consultora McKinsey & Co., como resultado de la automatización que se dará en los empleos en la próxima década, la fuerza laboral global sufrirá un cambio dramático. De este mismo estudio se deriva que la necesidad de habilidades cognitivas básicas disminuirá en un 15%, mientras que las habilidades que no pueden ser reemplazadas fácilmente por las computadoras tendrán una gran demanda. Estas habilidades son las sociales y emocionales como el liderazgo, la empatía, la creatividad o la resolución de conflictos. Por lo tanto, estas son las habilidades que deberíamos enseñar en las escuelas si queremos preparar a los estudiantes para los trabajos del futuro.

Pero a menudo se presentan dificultades para enseñar y evaluar estas habilidades fundamentales en las escuelas, debido a que no están contempladas en el currículo académico. Los juegos son una plataforma adecuada para que los estudiantes aprendan las habilidades básicas para el desenvolvimiento en la sociedad. Muchos de los atributos que necesitarán para sobresalir en la escuela o en la fuerza laboral (trabajo en equipo, resolución de problemas, etc.) se correlacionan con el éxito en el mundo del juego y en otros ámbitos.

A continuación, os dejamos seis habilidades blandas que los estudiantes necesitan y qué herramientas se pueden utilizar en las aulas para desarrollarlas.

1.Liderazgo El liderazgo es una de esas habilidades beneficiosas de aprendizaje permanente que pueden cambiar la vida de las personas. Hay que tener claro que quien lidera no es solo quien maneja las cosas, sino que lo que hace un líder es inspirar, motivar y empoderar. Los verdaderos líderes ven lo mejor en las personas y les enseñan a aprovechar su potencial en todo lo que hacen. Hay que lograr que los alumnos pasen de la actitud “yo puedo hacerlo” a “nosotros podemos hacerlo”, ya que hace que todos sean mejores. 

Cómo llevarla a cabo: Dinámicas como los juegos de rol o el “líder de ciegos” contribuyen a que los alumnos se enfrenten a posibles situaciones que puedan surgir en la vida. En el primer caso se trata de distribuir diferentes papeles entre los participantes (como el pesimista, el experto, el proactivo) y dejar que interactúen representando a cada personaje. Tras la representación, es importante que se analicen los fallos y aciertos que se han cometido durante el juego de rol y volver a repetir la simulación aplicando estas sugerencias. En el segundo caso, se dividen en dos grupos: uno de ellos llevaran los ojos vendados y el otro no. Estos últimos serán los líderes que guiarán a los ciegos a través de diferentes ejercicios (como llenar vasos de agua, por ejemplo). El juego sirve para analizar los estilos de liderazgos, la impartición y recepción de órdenes y la resistencia o aceptación al mando.

2.Trabajo en equipo ¿Por qué cuesta tanto desarrollar el trabajo en equipo? Teniendo en cuenta que es una circunstancia que deberemos atravesar tanto en la escuela como en la universidad y en la mayor parte de nuestra vida laboral. Hablar de “trabajo en equipo” hace alusión a negociación, reparto de tareas y resolución de conflictos. Al mismo tiempo, lleva a la satisfacción de compartir metas y a desarrollar un sentimiento de pertenencia de grupo. En la sociedad actual que estimula la competitividad y el individualismo, el trabajo en equipo representa un gran desafío que es necesario aprender en las aulas.

Cómo llevarla a cabo:

  • Una de las dinámicas más conocidas para promover el aprendizaje cooperativo es la Técnica del Puzzle. Los estudiantes son divididos en grupos de aproximadamente cinco o seis. A cada grupo se le asigna un contenido para estudiar y cada alumno debe convertirse en experto en un aspecto de ese tema. Luego, cada uno es responsable de enseñar a los otros su tema investigado y en conjunto deben crear un documento.

  • Por su parte, la Técnica del Tándem es ideal para que los alumnos desarrollen su capacidad de negociación. Se da una consigna y cada alumno debe buscar una solución a un problema. Luego, en grupos de dos personas se deben compartir las ideas y llegar a un acuerdo sobre cuál es la solución a tomar.

  • Y en la Técnica de la Ruleta el objetivo es que cualquiera se puede convertir en representante del grupo. Una vez en grupo se pide que los alumnos se numeren y se da un tema para investigar. Una vez finalizado el trabajo, se sortea un número y el elegido se convertirá en representante del grupo. Debido a que todos deben estar al tanto de lo investigado, con esta técnica se debe integrar en el trabajo a todos los participantes del grupo.

3.Comunicación

Otra de las habilidades blandas que los estudiantes necesitan desarrollar en la escuela es la comunicación. Tener habilidades de comunicación significa mejores relaciones, mayor empatía hacia el otro y, a la vez, más productividad en las tareas.

Cómo llevarla a cabo:

  • Con escucha activa, tratando de escuchar al alumno con atención, y haciendo preguntas según sea necesario, para comprender el mensaje y las emociones de la otra persona.

  • Escoger el mejor momento y lugar para comunicarse es importante. Conviene buscar un lugar adecuado, que sea tranquilo y que, por ejemplo tras una discusión, no estén los sentimientos a flor de piel.

  • Utilizar preguntas abiertas para demostrar a nuestro alumnado que realmente estamos interesados en aquello que nos está contando.

  • Fomentar la empatía, es decir, la capacidad de comprender, ser consciente, sensible y experimentar indirectamente los sentimientos, pensamientos y experiencias de otro.

4.Resolución de problemas

En lo que respecta a las habilidades blandas que los estudiantes necesitan para el aprendizaje permanente, esta es una de las más importantes. Resolver problemas del mundo real es crucial para sobrevivir y prosperar en el presente y el futuro.

El mundo está cambiando constantemente y seguirá cambiando. Debido a este hecho, los alumnos estarán resolviendo problemas futuros que ni siquiera podemos imaginar todavía. Se enfrentarán a desafíos que requieren habilidades para definir un problema, diseñar una solución adecuada y ponerla en práctica.

Cómo llevarla a cabo:

  • Fomentando la creatividad y la capacidad de producir y desarrollar trabajos, teorías, técnicas o pensamientos originales.

  • También desarrollando el pensamiento crítico, es decir, el proceso de conceptualizar, analizar y sintetizar información de manera objetiva para llegar a una conclusión o formarse un juicio.

  • Una idea puede ser llevar a cabo un “Diario de las emociones”, como una manera de ayudarles a trabajar los conflictos que se les presentan en el día a día. Un cuaderno donde los alumnos identifiquen y vuelquen los conflictos diarios con los que tienen que lidiar y, a partir de poder identificarlos, poder darles las herramientas para poder resolverlos.

5. Gestión del tiempo

Solo hay 24 horas en cada día y lo que hagas con ese tiempo marca la diferencia. Por eso es importante desde la edad escolar enseñar a administrar el tiempo de estudio con el tiempo de ocio. Si bien en primaria y secundaria, los alumnos no notan la importancia de la gestión del tiempo, es clave en los primeros años de universidad cuando aumenta la carga horaria de estudio y se quiere a la vez tener más tiempo libre y de sociabilización.


Cómo llevarla a cabo:

Una manera muy sencilla de comenzar a organizar los tiempos es el uso de la agenda diaria. Puede ser tanto la clásica agenda en papel como una versión en línea, o ambas. Así aprenderán a administrar el tiempo sabiamente y obtendrán el máximo provecho de cada día.

También el establecimiento de metas. La primera parte del proceso es identificar qué se desea lograr, para luego planificar metódicamente los pasos que se puede tomar, teniendo en cuenta los tiempos, para lograr esta meta.


6. Habilidades organizativas

Además de saber gestionar el tiempo, mantenerse organizado permite ahorrar tiempo valioso para poder hacer todo lo que se necesite hacer. Como dice la frase “Un lugar para todo y todo en su lugar”, es bueno transmitir que hay que mantener todos los materiales de estudio (calculadora, agenda, libros, cuadernos, computadora portátil, etc.) en un lugar conveniente.

Cómo llevarla a cabo:

  • Categorizar, etiquetar y ordenar para mantener las cosas limpias y ordenadas.

  • Representar el día visualmente.

  • Dividir proyectos grandes en pequeños pasos.

  • Organizar listas de cosas por hacer en orden lógico.

  • Otra opción puede ser codificar por color las tareas.

El perfeccionamiento de estas habilidades no solo posiciona a los estudiantes para el éxito en la fuerza laboral; también los prepara para superar la adversidad en la escuela y la vida. Los convierte en seres humanos más completos que pueden prosperar en una variedad de situaciones y cultivar relaciones ricas y gratificantes con los demás.



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